El rugby es un deporte que nació en Inglaterra, pues sus normas se establecieron por la Rugby School en el siglo XIX. Este deporte se practica a nivel internacional ya que es muy popular en todos los territorios británicos, además de Australia, Fiyi, Nueva Zelanda, Sudáfrica, Uruguay, Argentina, Francia, etcétera. Si alguna vez has visto este deporte, te habrás fijado en sus formaciones. Una de ellas es la melé o scrum. ¿Sabes qué es la melé en rugby?
La melé o scrim en rugby: ¿qué es y cómo se hace?
La melé en rugby también se llama scrum y es una de las formaciones más características de este deporte practicada por la delantera. Su objetivo es volver a empezar el juego o reiniciarlo con una lucha por la posesión del balón después de que ha ocurrido una infracción o detención. La melé se caracteriza por la técnica, coordinación y fuerza que presenta la delantera del equipo de rugby.

Esta formación de rugby se practica con un máximo de ocho jugadores por equipo; el mínimo de jugadores para esta formación es cinco, pero lo más habitual es que sean ocho. Estos se colocan para formar tres líneas por cada equipo y se agarran entre ellos. Los jugadores se juntan de tal forma que las cabezas de las primeras líneas se intercalan. Con esta formación se crea un túnel a través del cual el medio melé introduce la pelota; con esta acción, los jugadores de la primera línea son capaces de disputar la posesión del balón talonando con el pie. Los talonadores o hookers deben de tener ambos pies en el suelo hasta el balón logre pasar.
Además de llamarse scrum, a la melé en rugby también se le conoce como Ley 20, pues es precisamente en este «artículo» de la legislación sobre rugby donde se establecen todos los principios relativos a esta formación: desde su composición hasta que finaliza. ¿Sabes por qué se le llama melé? Aunque el nombre de esta formación en inglés es scrum, en España se utiliza el mismo nombre que en Francia, pero castellanizado: mêlée.
La formación de la melé en rugby
Como ya adelantábamos, la melé en rugby ocurre con la formación de dos bloques de jugadores de diferentes equipos, formando packs con sus ocho delanteros, llamados también forwards. Estos siguen la estructura de tres líneas de acuerdo a lo establecido en la Ley 20. Una vez que se han formado, los jugadores se agachan y se colocan unos frente a otros para sujetarse y esperar a que el árbitro de la orden de empujar. Aquí es cuando los jugadores deben de avanzar sobre el otro para conseguir la pelota.
A través del scrum se pretende sancionar una falta que ha sido leve con el objetivo de poner la pelota en juego. En esta formación, el equipo no sancionado es quien tiene ventaja al ganar el derecho de tirar la pelota entre ambos packs. El objetivo es hacerse con la pelota hasta que esta salga por la parte de atrás de la formación, del lado de uno de los packs, para que la pelota pueda disputarse. El empuje entre los jugadores sigue una serie de reglas con el objetivo de que los jugadores no se hagan daño.
La formación básica de la melé en rugby es de tres líneas. La primera línea está formada por tres jugadores, la segunda, por dos y la tercera línea por tres. La primera línea de la melé se forma por dos pilares que se colocan a cada lado de la línea, y, en el centro va el hooker o talonador. Este es el encargado de enviar la pelota hacia atrás utilizando su talón. La segunda línea de la melé se conforma por dos jugadores, habitualmente de gran altura. La última línea se forma por un jugador central, rodeado por dos alas. Sin embargo, existen otras formaciones poco habituales, pero válidas dentro del juego. Estas son las formaciones 3-4-1, 3-3-2 y 3-3-1 y se utilizan cuando se quiere tener más contacto con los defensas medios.

Dentro de las reglas de la melé encontramos que los jugadores deben de ir informando del scrum mientras el árbitro de las indicaciones: cuclillas (crouch), tomarse (bind) y ya (set). Este es un aviso para que las primeras líneas de cada equipo se tomen. Por otra parte, cuando se lance la pelota, los bloques de jugadores deben de empujar hacia adelante. ¿Y quién lanza la pelota? Como ya adelantábamos, el medio scrum o medio melé es el jugador que lo hace y espera, fuera de la formación, a que la pelota salga de su lado, pero no forma parte del bloque.
Dentro de las reglas de formación de la melé, los jugadores de la primera línea deben estar conectados de tal manera que no se enfrenten las cabezas (esto para las filas frontales); los otros jugadores, deben de permanecer agachados y con un brazo y mano, como mínimo, que oscile y tenga libertad de movimiento a lo largo del cuerpo del compañero.
Por último, al ser una formación un tanto compleja, en caso de que esta se derrumbe, el juego se detiene al instante; pero si el derrumbe ocurre de manera intencionada o se gira más de 90 grados, se sanciona con un penal al equipo causante.
¿Dónde se forma la melé?
Esta formación debe erigirse donde ocurre la infracción o detención que la produce. Si la sanción ocurre a menos de cinco metros de alguna de las líneas laterales, la sanción debe de formarse a cinco metros de esa línea lateral y solo puede formarse melé dentro del campo de juego. Es el árbitro quien debe de indicar la melé marcando con un pie el lugar exacto donde los equipos deben de posicionarse para el scrum.
Una vez que el árbitro ha designado el sitio, los equipos tienen 30 segundos para hacer la formación. En caso contrario, el árbitro pitará un golpe franco (una patada) como sanción.