El atún se considera uno de los alimentos más accesibles en el mercado, y al mismo tiempo es fácil de preparar e incorporar en distintos tipos de dietas. A pesar de esto, no se recomienda consumirlo con mucha frecuencia, ya que contiene altos niveles de calorías y de sodio. Por otro lado, uno de los motivos por los que debes limitar tu ingesta de atún semanal es por el riesgo de intoxicación por mercurio.
Se calcula que el atún más grande (un promedio de 100 kilos de peso) contiene concentraciones mercurio mayores a 10.000 veces la dosis que se encuentra en su habitad natural. Por lo tanto, es considerado peligroso para el consumo habitual de las personas.
Por este y muchos otros motivos, se recomienda tomar las previsiones necesarias a la hora de comer atún. Conoce cuáles son los 5 motivos por los que debes limitar tu ingesta de atún semanal.

Por qué limitar tu ingesta de atún semanal
1. Contiene mercurio
El mercurio es un elemento químico que se encuentra en la composición natural de la corteza terrestre. Dicho elemento se libera de forma natural cuando se erosionan las rocas, se descompone el suelo o por erupciones volcánicas. El atún, el tiburón y el pez espada pueden acumular grandes concentraciones de mercurio en su piel. La cantidad de mercurio es mayor dependiendo del tamaño del pez.
Una de los principales entradas de mercurio al cuerpo humano es por causa del consumo de alimentos extraídos del mar, sobre todo por los pescados grasos de grandes dimensiones. El mercurio se encuentra en distintos pescados, entre ellos el atún.
Cabe destacar que la cantidad de mercurio en los atunes analizados está muy por debajo del límite legal, 1 parte por millón (ppm). Considerando el contenido medio, una persona debe consumir 10 latas de atún para exceder las recomendaciones de consumo semanal.

2. Alto contenido de sodio
Las personas deciden comer aún por su alto contenido de proteína, pero no se percatan en que una sola lata de atún contiene casi 600 miligramos de sodio, siendo perjudicial para aquellos que sufren de hipertensión. Incluso muchas personas tienen problemas con la sensibilidad al sodio, por lo que un alto consumo aumenta el riesgo de sufrir un accidente cardiovascular.
Las cantidades de sodio varían dependiendo del tipo de atún, por ejemplo: el atún en agua (enlatado) contiene 338 miligramos de sodio por cada 100 gramos, el atún en aceite (enlatado) 354 miligramos de sodio por cada 100 gramos y el atún de aleta azul contiene 39 miligramos de sodio por cada 100 gramos.

3. Enfermedades causadas por el atún
En algunas culturas las personas consumen pescado crudo, por lo que pueden llegar a enfermarse por un mal almacenamiento y cuidado del pescado, pero en algunas ocasiones el pescado está parasitado por larvas, esta enfermedad es conocida como Anisakiasis.
La Anisakiasis es una enfermedad muy frecuente, surge especialmente al consumir pescados crudos o poco cocidos que contienen gusanos. Al principio se manifiesta con dolores estomacales o incluso por alergias. Se recomienda tomar las previsiones necesarias antes de consumir atún o cualquier otro pescado crudo para evitar enfermarse.

4. Otros contaminantes
La mala manipulación del atún hace que las personas se enfermen de escombroidosis o por causa de la contaminación por histamina. Esto ocurre por consumir atún fresco en mal estado. La histamina es una alteración que ocurre cuando un aminoácido presente en el pescado, la histidina, se transforma (cuando el pescado no ha sido bien manipulado) o simplemente cuando no es bien conservado o refrigerado.
La manera más simple de evitar enfermarse es eligiendo cuidadosamente el atún que vayas a consumir. Hay que tener en cuenta las condiciones donde ha sido manipulado y el estado en el que se encuentra al momento de cocinarlo.

5. Niveles altos de calorías
El atún es consumido por su alto contenido de proteínas, pero al mismo tiempo es considerado un alimento con una gran cantidad de calorías. Las cantidades de calorías en el atún pueden variar dependiendo de su estado antes de ser cocinado, por ejemplo:
El atún fresco enlatado contiene una cantidad aproximada de 180 calorías, el enlatado con aceite contiene una cantidad de 186 calorías y el enlatado al natural contiene 128 calorías.
Si no puedes comprar atún fresco en la pescadería o en un supermercado, entonces debes elegir la opción del atún enlatado al natural, así evitarás consumir calorías extras. Por otro lado, la mejor opción de alimentos para combinar el atún son los vegetales frescos y una vinagreta completamente natural.
Una de las mejores opciones para evitar una alta ingesta de calorías es utilizando recetas saludables y creativas hechas con atún en lata y otros ingredientes naturales.

Conclusión
El atún es un tipo de pez muy conocido que se usa en muchas recetas a la hora de cocinar. Puedes conseguirlo fácilmente en cualquier tienda de alimentos, por lo tanto este es el principal motivo por el que puedes abusar de su ingesta semanal recomendada.
Te recomendamos limitar tu ingesta de atún semanal por varios motivos, siendo alguno de ellos la cantidad de mercurio que pueden contener, el alto contenido en sodio, algunas enfermedades ocasionadas por un almacenamiento indebido o incluso por las cantidades de calorías.