Adaptaciones al entrenamiento de fuerza

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Este tipo de entrenamiento tiene como objetivo incrementar la resistencia anaeróbica, la fuerza muscular y por consiguiente el tamaño de los músculos. El entrenamiento de fuerza produce una serie de adaptaciones sobre el sistema muscular a varios niveles de nuestro organismo, que detallaremos a continuación:

Cambios neurológicos

Al contrario de lo que pueda parecer lógico, las primeras mejoras producidas en la fuerza se deben a un factor neurológico, en concreto, se debe a un mayor reclutamiento de las unidades motoras que accionan las fibras musculares y a una mejora en el ritmo de activación de las mismas. Por lo tanto, cuando comenzamos un entrenamiento de fuerza, nuestras primeras mejoras notables se deberán principalmente a un uso más eficiente de nuestro sistema neuromuscular. Cabe destacar que un entrenamiento regular de la fuerza, provoca mejoras neuromusculares de gran importancia.

Cambios en el tejido muscular

Lo primero que resulta más apreciables, es un aumento en volumen del tejido muscular. Lo que realmente ocurre es que aumenta la sección transversal de las fibras musculares, lo que denominamos hipertrofia. A diferencia de las primeras semanas de entrenamiento, donde las mejoras en la fuerza son de carácter neurológico, transcurridas varias semanas, los incrementos en la fuerza vienen dados por la hipertrofia muscular. Además, debemos saber que este incremento de volumen se produce en las fibras de tipo I (de contracción lenta), y en las de tipo II (de contracción rápida). En definitiva, el entrenamiento de fuerza no solo produce un aumento en nuestro tejido muscular, sino que además aumenta la calidad del mismo.

Cambios esqueléticos

Las principales adaptaciones que sufre nuestro cuerpo a nivel esquelético, es una mejora de la densidad ósea, ya que realizar un entrenamiento de fuerza estimula las células óseas. Además se ha demostrado que puede frenar el desarrollo de la osteoporosis, enfermedad especialmente común en las mujeres a partir e la menopausia.

Cambios metabólicos

Lo primero es tener claro que la fuerza trabaja principalmente sobre el sistema del fosfágeno y el sistema anaeróbico (glucólisis rápida). Los principales cambios se producen a nivel de este sistema, ya que se incrementan los niveles de ATP y fosfocreatina. A nivel del sistema anaeróbico, la principal mejora se traduce en un aumento de las enzimas encargadas de facilitar el proceso. En resumen, todo esto genera una mayor cantidad de sustratos energéticos y enzimas, lo cual a su vez produce una mejora en la resistencia muscular y la capacidad del individuo para realizar más repeticiones, o mantener el esfuerzo durante un mayor tiempo.

Cambios cardiovasculares

A diferencia del trabajo aeróbico, el entrenamiento de fuerza (trabajo anaeróbico), no produce una mejora significativa en la capacidad máxima de oxígeno. No obstante, al mejorar la eficiencia y resistencia muscular, se mejora el rendimiento del entrenamiento aeróbico. También se consiguen mejoras sobre la capilarización de los músculos.

Cambios en la composición corporal

Cuando incrementamos nuestra masa muscular, el cuerpo realiza un mayor consumo de calorías, tanto en reposo como realizando una actividad física; por lo tanto un mayor consumo de calorías se relaciona con una pérdida de grasa mas eficaz, es decir, al aumentar nuestro consumo energético, combinado con una ingesta de calorías controlada, supondrá una mejora en la pérdida de tejido adiposo.

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1 comentario en «Adaptaciones al entrenamiento de fuerza»

  1. Gracias por responderme. No encontré el diagnóstico pero sé que las hernias lumbares son L1, L2, L3.y L5. Me hicieron un tratamiento en la clínica del dolor durante un año con acupuntura china y gracias a eso logré volver a hacer mi vida casi normal, pero debo cuidarme de hacer movimientos bruscos, levantar cosas pesadas,barrer, trapear. me dijeron que iniciara el ejercicio solo con Elíptica progresivamente y que si hacía pesas, lo hiciera siempre apoyando la espalda, así que inicié con la Elíptica, fui aumentando tiempo y velocidad y luego incluí pesas para brazos y busto pero acostada y luego abdominales altos y bajos. últimamente me he atrevido con precaución a hacer abdominales arrodillada con deslizamiento de un rodillo hacia el frente y lateral derecho e izquierdo. No he vuelto a sentir una crisis tan terrible como esa, pero siento que me hace falta ejercitar piernas y glúteos y distribuir tiempo y ejercicio para cada día. A veces gasto tres o mas horas en esto o hay días que me aburro de hacer lo mismo.Por eso necesito orientación para hacer en casa.

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