Nadar sin haberlo hecho antes puede resultar abrumador, ya que no sabes lo que haces o lo que te espera. A pesar de ello, no debes preocuparte: hay medidas que puedes adoptar para lograr que esto sea menos difícil.
La natación es uno de los deportes que pueden practicar la mayoría de las personas, sin tener en cuenta factores como la edad, estatura o peso. Esto se debe a que dentro del agua se tiene un bajo impacto sobre las distintas partes del cuerpo, lo que reduce la tensión de los huesos y las articulaciones. Además, mejora tu fuerza muscular y condición vascular.
Descubre cómo empezar a nadar si nunca lo has hecho.
Primera medida antes de empezar a nadar
Como sucede con la mayoría de deportes, la natación requiere tiempo y esfuerzo. No basta con conocer las nociones básicas, debes especializarte con cada práctica de modo que los resultados sean mucho más prometedores. Para ello, es recomendable que tomes clases de natación para adultos. Averigua en tu localidad sobre algún centro que proporcione este servicio, ya que en esta fase lo mejor es entrenar con un instructor.
Aprender a nadar sin ayuda de un entrenador
Si insistes en aprender por tu cuenta, lo recomendable es que comiences con el estilo libre, donde tu cabeza, caderas y pies deben formar una larga línea. Ten presente que si se hunden el centro de tu cuerpo o tus pies, estarás ralentizándote y desperdiciando energía.
En caso de que esto ocurra, considera empujar un poco la cabeza hacia abajo si estás arrastrando lo pies y, cuando estés en tierra, realiza ejercicios para tu core: estos evitarán que tu centro se hunda.
Cómo nadar con estilo libre por primera vez
El estilo libre es la modalidad de nado donde los movimientos se desarrollan de forma natural, sin brusquedad ni esfuerzos localizados, pero realizar esta técnica de forma correcta requiere esencialmente una buena coordinación.
- Una vez que estés en posición correcta y comiences a nadar, alarga el cuerpo con cada golpe. Recuerda que cuando la mano y el brazo entran y se mueven a través del agua, no deben cruzar la línea media del cuerpo.
- No ignores la técnica de la parte inferior del cuerpo, se sabe que la parte superior es el motor de la natación, pero los nuevos nadadores comúnmente cometen el error de patear demasiado.
- Patea solo lo necesario para mantener las piernas en alto, para ello un golpe ligero y rápido es suficiente, la patada absorbe grandes cantidades de energía y acelera tu ritmo cardiaco. Igualmente, solo debe haber un poco de tensión en tu cuerpo para mantenerlo alineado.
Dale tiempo a la técnica: hasta los nadadores expertos la trabajan constantemente.
Rutina para nadar si nunca lo has hecho antes
Si no quieres tomar clases con un experto, debes empezar con una rutina diseñada para novatos de la natación. La siguiente es la más recomendada:
- Calentamiento: Nado fácil por 10 minutos, con 10 minutos adicionales de longitudes más duras con descansos de 10-15 segundos.
- Intervalos: 15 series de 100 metros, con descansos de 20 segundos entre series.
Realiza este entrenamiento mínimo 3 veces por semana para ver resultados.
Equipo de natación esencial para empezar a nadar
Es muy importante contar con el equipo adecuado para practicar natación. Lo básico consta de bañador, gafas y gorro; y si lo requieres, puedes hacerte con unos tapones para los oídos o pinzas para las fosas nasales.
Estos son los implementos imprescindibles para empezar a nadar.
1. Lentes de natación
Las lentes o gafa de natación son la herramienta más preciada de un nadador. Por ello, debes tener cuidado a la hora de elegirlas. Para ello, sigue estas directrices:
- Selecciona el tamaño y material correcto. Por ejemplo, las gafas de policarbonato son las más ligeras, pero su estructura rígida hace que al principio sea difícil adaptarse. En cambio, las de silicona son más flexibles.
- Intenta que tengan una especie de almohadilla alrededor, te ayudará a un mejor ajuste, así como una boquilla ajustable.
- Necesitarás un juego de lentes transparentes para nadar en interiores y tintados para exteriores.
2. Gorro de natación
Este elemento, además de reducir la resistencia del agua en la natación, es de uso obligatorio en todas la piscinas públicas climatizadas. Por lo tanto, elegir bien el material es necesario, no solo por la resistencia al agua, sino porque te pueden producir calor e incluso agobio.
Los gorros de tela para la mayoría son más cómodos, pero su tiempo de vida útil es corto. Por el contrario, los de silicona se ajustan al contorno de tu cabeza y suelen durar varios años, siempre y cuando se cuiden bien.
3. Bañador para natación
- Si eres hombre, evita las bermudas y trajes holgados, de lo contrario dificultarás tu movimiento y aumentarás la resistencia.
- Si eres mujer, evita los bikinis o bañadores con escote bajo y espalda abierta. En su lugar, adquiere un bañador de una sola pieza, si es posible con cierre o tirantes en la espalda, para quede bien fijado al cuerpo.
Por otro lado, las herramientas de agrupación como los kickboards o tablas, elementos de gran utilidad para entrenar cuando eres principiante. Ellas te ayudarán a desarrollar resistencia y a mejorar tu estilo. En algunas piscinas, cuentas con esos equipos o bien puedes comprar el tuyo.
Conclusión
Para los principiantes en la natación, la mejor opción es apuntarse a una clase para adultos. Sin embargo, si quieres aprender por tu cuenta es totalmente válido y debes tener en consideración muchas cosas, como la técnica de los estilos, las rutinas y el equipo básico necesario, así como el que vayas necesitando a medida que avanzas en la disciplina.
Referencia
- Hamilton, M. Swimming for Beginners: Read This Before You Dive In. Para Livestrong. [Revisado en agosto de 2019]
