Actualmente se conocen varios factores que lo pueden prevenir, entre ellos, una correcta alimentación basada en frutas y verduras. Por otro lado, la pérdida de apetito, náuseas, sabor metálico o el poco sentido del gusto son efectos secundarios de algunos tratamientos contra esta enfermedad, que a menudo afectan a la alimentación de los pacientes, el cual es un problema importante, ya que estar bien nutrido y alimentado es esencial para luchar contra la enfermedad.
Las frutas, son una fuente nutritiva por excelencia. Por otro lado, los vegetales tienen vitaminas y minerales que ayudan al funcionamiento del sistema inmunitario y refuerzan las células del cuerpo humano. Ambos contienen compuestos que promueven la salud que pueden retrasar el crecimiento del tumor y reducir ciertos efectos secundarios del tratamiento para ayudar a facilitar su camino hacia la recuperación.
Te mostramos que frutas comer si sigues un tratamiento contra el cáncer.
5 frutas anticancerígenas recomendadas
1. Arándanos
Los arándanos son una de las mejores frutas anticancerígenas que existen, ya que son muy ricos en antioxidantes. El principal que encontramos es la antocianina, pero también hallamos ácido elágico y urolitinas, que se forman a partir de los arándanos y ayudan a minimizar el daño de los radicales libres al ADN que puede ocasionar cáncer.
Los arándanos estimulan la muerte de células dañinas y además disminuyen el crecimiento de las células de cáncer de boca, colon, mama y próstata. Por otra parte, contienen vitamina C, que es reductora del cáncer, ya que atrapa los radicales libres y protege el ADN celular, a la vez que inhibe la formación de tumores.
Además estas maravillosas frutas, también pueden ayudar a aliviar la «quimioterapia cerebral», un término utilizado para describir los problemas de memoria y concentración que algunas personas experimentan durante el tratamiento y la recuperación del cáncer. Un pequeño estudio encontró que beber zumo de arándano a diario durante 12 semanas mejoró la memoria y el aprendizaje en adultos mayores (Krikorian et al., 2010).
2. Naranjas
Las naranjas son una fuente excelente de Vitamina C. Además, proporcionan una cantidad importante de ácido fólico, fibra dietética, potasio y betacaroteno. Pertenecen a la familia de las frutas anticancerígenas no solo por la vitamina C, sino por los bioflavonoides que ayudan a asimilarla y evitan que esta se oxide.
La vitamina C juega un papel clave en la inmunidad y puede ayudar a fortalecer tu sistema inmunológico durante y después del tratamiento del cáncer. La investigación sugiere que la vitamina C puede reducir el crecimiento y la propagación de las células cancerosas y actuar como un agente terapéutico contra ciertos tipos de cáncer (Lee et al., 2019; Park et al., 2018)
Ademas, los limonoides presentes en sus cáscaras protegen al tejido pulmonar contra el cáncer de pulmón. Así que, ¡no olvides incluirlas en tu dieta!
3. Plátanos
Seguro que alguna vez has escuchado que los plátanos son ricos en potasio, propiedad muy beneficiosa para los músculos y el corazón. Pero, aparte de eso, algunos de sus compuestos han sido hallados como eficaces en la prevención de la producción adicional de células cancerígenas.
Además, no solo son fáciles de tolerar para las personas con dificultades para tragar, sino que también son una buena fuente de nutrientes importantes, como la vitamina B6, el manganeso y la vitamina C. También contienen un tipo de fibra llamada pectinas, que puede ser especialmente beneficiosa para quienes experimentan diarrea causada por tratamientos contra el cáncer
Debido a que los plátanos son ricos en potasio, también pueden ayudar a reponer los electrolitos perdidos por la diarrea o los vómitos. Además, los estudios de probeta han observado que la pectina puede ayudar a proteger contra el crecimiento y desarrollo de las células responsables del cáncer de colon (Tan, Chen, Liu, Yang y Li, 2018).
El plátano puede ser uno de tus grandes aliados naturales para reducir el riesgo de desarrollar cáncer de intestino o leucemia.
4. Aguacates
El aguacate es otras de las frutas anticancerígenas recomendadas, sobre todo, porque contiene muchas grasas buenas, como el omega 3.
Además, el aguacate es una gran fuente glutatión, un antioxidante que ayuda a eliminar y destruir los radicales libres que provocan la mutación de nuestro ADN y dan origen al crecimiento de células cancerígenas. Y, por si fuera poco, los aguacates también contienen un alto contenido de vitamina C, capaz de atrapar los radicales libres, proteger el ADN celular, y así inhibir la formación de tumores.
Otras sustancias combativas del cáncer en el aguacate son:
- Carotenoides como el beta-caroteno y alfa-caroteno y la zeaxantina, que también inhiben el crecimiento de cánceres de próstata, mama y oral.
- El abundante contenido de vitamina E, que reduce drásticamente la incidencia de cáncer de mama.
Puedes comer los aguacates en ensaladas o con un poco de pan. También son deliciosos si los comes sin acompañamiento: córtalos por la mitad y cómelos con cuchara.
5. Manzanas
Bien se dice que ‘‘una manzana al día aleja al médico de tu vida’’. Y es que está demostrado que son sanas para el organismo humano, aunado a lo que aportan en la lucha contra el cáncer.
Las manzanas contienen procianidinas, compuestos que inducen la muerte natural de las células malignas. Además, ¡la cáscara es la mejor parte! Es donde se encuentran concentrados los triterpenoides, compuestos fitoquímicos que contienen una gran capacidad para detener la reproducción de las células cancerosas.
Cada porción es rica en fibra, potasio y vitamina C, lo cual puede beneficiar la recuperación del cáncer. La fibra que se encuentra en las manzanas puede promover la regularidad y mantener el movimiento a través del tracto digestivo. Además, el potasio puede ayudar a prevenir la retención de líquidos, un efecto secundario común de algunos tipos de quimioterapia.
Conclusión
Las frutas son uno de los alimentos más deliciosos que la naturaleza pone a nuestro alcance. Lo mejor es que todas y cada una de ellas están llenas de beneficios para nuestro organismo. Nos brindan vitaminas y minerales que nuestro cuerpo necesita para estar en óptimas condiciones. Pero algunas van más allá y pueden hacerle frente a una de las enfermedades más delicadas que existe: el cáncer.
Comer ciertas frutas puede beneficiarte durante y después del tratamiento contra el cáncer. Disfrutar estas frutas saludables en combinación con una dieta completa puede hacer que te sientas mejor y que comiences el camino hacia la recuperación.
Referencias
- Krikorian, R., Shidler, M. D., Nash, T. A., Kalt, W., Vinqvist-Tymchuk, M. R., Shukitt-Hale, B. y Joseph, J. A. (2010). Blueberry supplementation improves memory in older adults. Journal of Agricultural and Food Chemistry. doi: 10.1021/jf9029332
- Lee, S. J., Jeong, J. H., Lee, I. H., Lee, J., Jung, J. H., Park, H. Y., Lee, D. H. y Chae, Y. (2019). Effect of High-dose Vitamin C Combined With Anti-cancer Treatment on Breast Cancer Cells. International Journal of Cancer Research and Treatment. doi: 10.21873/anticanres.13172
- Park, S., Ahn, S.,Shin, Y.,Yang, Y. y Yeom, C. (2018). Vitamin C in Cancer: A Metabolomics Perspective. Frontiers in Physiology. doi: 10.3389/fphys.2018.00762
- Tan, L.,Chen, W., Liu, Q., Yang, G. y Li, K. (2018). Pectin Oligosaccharides Ameliorate Colon Cancer by Regulating Oxidative Stress- and Inflammation-Activated Signaling Pathways. Frontiers in Physiology. doi: 10.3389/fimmu.2018.01504